Capitulo 15

La temperatura en la gran sala se reduce a condiciones árticas. La mirada ceñida y helada de Christian es seguida pronto por la furia rabiosa y finalmente remplazada por su mirada impasible, cuidadosamente educada mientras la realización de nuestro estado indefinido y de no-compromiso llama su atención. Puedo ver a Taylor sobre la inclinación de los hombros rígidos de Christian, armándose a sí mismo para una situación que podría salirse de las manos.

Sé exactamente lo que esto le debe parecer a Christian – alguien más robando su posición en una familia que él siente le pertenece. También sé que no me dará el beneficio de la duda en lo que se refiere al Dr. Shawn, sin tomar en cuenta que yo lo veo como a un amigo.

La adrenalina me hace saltar y me levanto rápidamente, mi movimiento poco natural – gritando mi culpa no intencional “Christian, ¡hola!” me esfuerzo con un chillido nervioso agudo. “Ven a conocer al Dr. O’Reily” fijo una sonrisa brillante en mi rostro casi pálido, que incluso mi creciente rubor no puede tapar.

El Dr. Shawn se voltea para seguir mí mirada sorprendida, sonriendo con una sonrisa abierta y sincera a Christian.

Oh Dios, ¡él no tiene idea! La doncella medieval en mi, inmediatamente se imagina la imagen de ellos dos en un duelo, con espadas y mi diosa interna se ventila a sí misma, sonrojada. ¡Ramera!

La expresión de Christian se altera de nuevo, esta vez es de sorpresa cuando evalúa el rostro fuerte y hermoso del Dr. Shawn. Estoy amarrada en mi lugar, fascinada por la medida sincera de Christian hacia el Dr. Shawn.

Chris corre hacia Christian y se planta en sus rodillas, clamando para que su papá lo levante. “Papi, papi, ¡tengo un cocodrilo! ¡Está debajo del sofá!”

Con una extraña manera suya, Christian le da su atención completa a Chris y sonríe cálidamente, cualquier pista de su guerra interna, escondida en lo profundo. “¿En serio? Vamos a tener que cazarlo y agarrarlo; no se permiten cocodrilos en casa, ¡ellos te pueden morder!” con eso, él gruñe y hace como si mordiera a Chris en su estomago.

Chris tiene otro ataque de risa y trata de zafarse de los brazos de Christian, retorciéndose y pateando salvajemente. Cuando Christian lo pone en el suelo, él corre y se esconde detrás de mí, deleitándose en el juego y obviamente ajeno a la corriente subyacente en la habitación. Se me ocurre que Christian no va a hacer ninguna locura con Chris alrededor y me trago un respiro de alivio.

El Dr. Shawn ha hecho su camino hasta donde esta Christian, extendiendo su brazo en modo de saludo, aun sonriendo pero con un toque de incertidumbre. Cuando Christian le devuelve el apretón de manos, la sala estalla con testosterona dura y pesada, ambos hombres bajan la cabeza ligeramente, miradas fijadas, como dos toros listos para el ataque. El Dr. Shawn llevando la peor parte de la fuerza de la mirada penetrante gris de Christian.

¡Santa Mierda!

Ellos no necesitan decir nada – las líneas de batalla se han delimitado – ambos con una clara comprensión de los parámetros y del premio. No hay espacios para presentaciones y sutilezas aquí… Estoy molesta que a pesar de que esto parece ser acerca de mí, yo no tengo nada que decir en este concurso de meadas escandalosamente ridículo.

“Taylor lo acompañará hasta afuera” Christian apenas logra ser civilizado.

El Dr. Shawn asienta, se aleja de las garras de Christian y hace lo peor que puede hacer. Camina casualmente hacia donde estoy y me planta otro beso en mis labios completamente aturdidos, sonríe y me guiña el ojo. Mis ojos se expanden en estado de shock y lo último de mi color se desvanece. Aun estoy clavada en el sitio, demasiado aturdida para moverme. Él levanta a Chris en el aire y le da un abrazo de oso.

“Adiós Dr. Shawn” la voz inocente de mi pequeño hijo contrasta duramente con el aire atronador de la gran sala y yo lo agarro hacia mí, preparada para protegerlo de la tormenta que se avecina.

El Dr. Shawn ha sacudido una bandera de color rojo brillante ante un toro ya agitado, está claro que el control de Christian esta desgastado, pendiendo de un hilo y rezo para que se contenga solo por un minuto más. Él deambula de nuevo hacia donde esta Christian – aparentemente despreocupado – pero por suerte, listo para irse.

Cuando pasa al lado de Christian, ellos fijan sus miradas de nuevo y veo que Christian le dice unas palabras a él. No puedo oír, pero veo que el cuerpo del Dr. Shawn se endurece en respuesta antes de que con grandes zancadas se marche, Taylor lo sigue para asegurarse de que se vaya.

Me dejo caer en el sofá tomando aire mientras lo hago. ¡Eso fue una locura intensa! Sé que debo estar agradecida de que no se golpearon hasta la mierda el uno del otro pero, estoy muy molesta de que haya llegado tan lejos. ¡La sobrerreacción de Christian fue mucha, por encima de todo!

Él pasa por mi lado, su ira aun muy enroscada dentro, descargando una promesa de violencia, mientras desaparece dentro de su estudio y golpea con fuerza la puerta.

Mientras estoy sentada allí, con el corazón bombardeando y los nervios ásperos, solo me hace ponerme más molesta. ¡Él fue quien envió el doctor hacia nosotros! Si me gusta y si soy honesta, él le hace bien a mi ego tembloroso – ¿Qué mujer no estaría halagada si un chico atractivo le presta algo de atención? – pero, eso es todo. Él no me provoca ese encrespamiento de los dedos, apretón de pelvis, deseo del corazón encogido que tengo con Christian. ¡Pero Christian está molesto conmigo! Yo no besé al doc, ¡él me besó! Yo no lo hice venir a Escala, Christian arregló todo. Estaba planeando en ir a este evento de caridad para ayudarlo – aunque – Estoy bastante segura que eso está fuera de las cartas ahora. Todo esto mientras Christian continua lamentablemente sin un compromiso conmigo!

¡Joder, joder, joder! Trato de sacar a la Ana 2.0 pero, ella está molesta también! Impulsada por la ira y la determinación, agarro a Chris y lo planto frente a la gran pantalla. Escojo una película, sabiendo que lo mantendrá clavado por un tiempo. Después de un beso y un abrazo, estoy lista para enfrentar a Christian, en lo que puede ser nuestro mayor enfrentamiento por ahora. Es hora de que él componga su maldita mente.

Mi golpeteo rápido en la puerta de su estudio está a tiempo con mi corazón latente pero, no espero a que él me invite a entrar. Abro la puerta y lo encuentro al teléfono. Solo capto lo último de la conversación.

“…sí, eso fue lo que dije, en una hora y media!” le ladra a la persona al otro lado de la línea y golpea su teléfono para colgar. Ojos de tormenta grises sin dejar de mirarme.

“¿Era ese el Dr. Flynn?” pregunto, una semilla de esperanza en mi pecho.

Él resopla, “No he visto a Flynn en años” su tono carga cada acusación que su corazón ha presentado hacia mí y su mirada es fría.

Ah, ¿sí?

Se eleva mi ira hirviendo, “tal vez deberías reconsiderarlo” el desafío se destella en mis ojos.

“¿Estas buscando una pelea Anastasia?” su cuerpo grácil esta rondando hacia mi desde detrás de su escritorio, depredador y malditamente aterrador.

Yo me alejo un poco, inyectando algo de calma en mi voz, “no, Christian pero, ¿Qué demonios acaba de pasar?”

“¿Qué pasó?” su murmullo de incredulidad gritando su ira tan profunda mientras una arruga se forma en su frente. “Dime Anastasia, ¿hay un maldito hombre vivo que no esté bajo tu hechizo?” Me gruñe esas palabras y doy un paso atrás, poniendo mi cuerpo al ras de la puerta cerrada. Golpea ambas palmas en la puerta, cada una a cada lado de mi cabeza, su forma tensa enjaulándome.

El sonido me hace saltar y por primera vez en la historia le tengo miedo, mucho miedo. Siento el calor de su furia, su mirada implacable perforando la mía. Mi boca está seca; solo puedo rogar por su misericordia con mis ojos mientras niego con la cabeza, no.

“¡Debería encerrarte en una maldita torre!” su rostro se encuentra a solo centímetros del mío, su respiración es entrecortada mientras se esfuerza ante su contención resbalosa.

La desobediencia se lanza a través de mi miedo y me reconecta con mi ira, “No soy tuya para que me encierres” Mi susurro ronco esta entrelazado con el tranquilo acero de la verdad.

Veo como mis palabras se asientan en él y cierra sus ojos, presionando su frente con la mía. Lo puedo oír rechinar sus dientes por la frustración. “¿Por qué estás molesto conmigo?” mi voz un poco más valiente ahora que lo veo de nuevo arañando su preciado control.

“Yo no lo traje a nuestras vidas, yo no lo besé de vuelta” deslizo mis manos por su pecho y luego acuno su cara, la siempre presente barbita rozando mis manos. “Cuando mucho estoy halagada por su atención” haré que abra sus ojos y me mire.

Sus parpados se abren y su mirada mordaz me quema con un celo febril. “Él quiere a mi hijo y él te quiere a ti, su deseo por ti quema desnudo en su rostro”

“Por ahora, estamos aquí. Contigo” hago una pausa para darle tiempo a mi declaración de obtener un control en su mente. “Pero, tú no puedes dejar que las cosas se salgan de control así, especialmente cuando Chris está alrededor. La cosa es, el doc ha sido genial con Chris y ellos genuinamente se caen bien. He empezado a verlo como un amigo” enfatizo la última palabra, mientras razono con él, todo esto mientras mantengo mi voz baja.

Cuando lo oigo tomar aliento para protestar le advierto con un dedo solitario en sus labios para que no me interrumpa. “Él puede querer todo lo que quiera pero, Chris es tu hijo, nada va a cambiar eso, nunca. Te he dicho lo que quiero de ti pero, tu eres el que se está conteniendo, hasta que eso no cambie, tu no vas a ejercer propiedad sobre mí.”

Estaba esperando que al sacar a relucir lo de su naturaleza posesiva, crearía una oportunidad de darle mi contrato pero, él lo anula y veo como mi oportunidad se desvanece.

“¿Te vas?” empuja la puerta y da un paso atrás; una mega dosis de angustia arrastra dos manos por su cabello. Una mirada de confusión pellizca sus facciones.

“No estoy segura de lo que estabas esperando Christian,” es mi turno de lucir escéptica y mis manos están extendidas, abiertas – las palmas hacia arriba, “una vez que esta amenaza se calme, nosotros vamos a ir a casa” trago contra mi garganta encogida. No quiero irme a casa pero, si nosotros no estamos juntos ¿Cómo me puedo quedar?

La resignación nubla sus ojos mientras acepta mis palabras y no por primera vez me pregunto lo qué sería necesario para hacerle ver que él se está negando a algo que quiere tanto como yo. Siempre lo supe, que iba a ser un trabajo épico derrumbar las paredes que él mantiene para esconderse pero, estoy empezando a perder la esperanza.

En el último momento me acuerdo de la invitación del Dr. Shawn. Mejor le digo a Christian antes de que se entere por otra forma acosadora. “Solo para que sepas, el Dr. Shawn me invito para que lo acompañe el Lunes en la noche para una beneficencia de Médicos sin Fronteras – solo como amigos – pero a la luz del… encuentro de hoy, no sé si voy a ir”

“No te quiero cerca de él” es una orden, firme y definitiva.

“Como dije Christian, no es tu decisión”

Nos miramos el uno al otro, tercos, rebeldes y las emociones se enredan en un lio torcido.

“Bastille me está esperando, me tengo que ir” Él baja la cabeza y sale del estudio.

Ah, de eso era la llamada. ¡Bien! ¡Ve a patear hasta la mierda de algo! Tal vez eso mejore su humor encabronado. En realidad, lo envidio; no me importaría patear hasta la mierda algunas cosas por mi misma en este momento!

Tanto para lograr una decisión de su parte.

Dejo el estudio tambaleándome, escurrida y descorazonada. El azote de mi fuerza de voluntad de luchar por esta relación está superando rápidamente mi deseo de estar en ella. Extraño a mi mamá, desearía poder llamarla para que viniera a cuidar a Chris y así poder revolcarme en mi autocompasión por un tiempo pero, mi pequeño campeón estará listo para la ronda del almuerzo ahora y una madre nunca tiene un día libre.

Como se predije las primeras palabras que salieron de la boca de Chris cuando me ve, es que tiene hambre. “¡Quiero pizza mami!”

Ah sí, Chris y pizza, suspiro internamente. Empecé esta cosa de hacer la pizza con él para enseñarlo como comer vegetales y pronto se convirtió en una de nuestras actividades favoritas. Las hacemos desde cero, extendemos la masa y la decoramos con un arco iris de vegetales. Le encanta tanto que se niega a comer pizza comprada así, que cuando otras madres tienen un descanso cuando es noche de pizza, para mí es un gran trabajo que culmina con una enorme tarea de limpieza.

Normalmente no me importa, me encanta el tiempo que pasamos juntos pero, hoy me falta mi entusiasmo habitual. “¿Qué tal unas tostadas con queso? ¡Yum, yum!” lo trato de engatusar.

“¡Nooooo, pizza!” se cruza de brazos y pone una mirada obstinada a la cual recientemente me he re-familiarizado. Así como la de su padre.

Sacudo mi cabeza. Tal vez sea bueno para nosotros, un poco de normalidad; también puede que mantenga mi mente alejada de pensar en la inminente visita de los abuelos. “Está bien amiguito, vamos”

Admiro la nevera bien surtida y encuentro más de lo que podía necesitar. Saco algunos guisantes con cascara; algo para que él haga, que no requiere de un cuchillo. Enciendo el horno y empiezo con la masa. Después de los guisantes, Chris hace el amasado y elijo algo frívolo de mi iPod para escuchar. LMFAO, eso estará bien, pienso cuando escucho los acordes de “I’m Sexy and I Know It” (“Soy sexy y lo sé”), empiezan a resonar en toda la cocina con una pulsación de impulso de energía.

04 Sexy and I Know It – LMFO

Chris decide hacer pizza para todos, Christian, Collins y los esperados abuelos, así que las hacemos en tamaños mini con una serie loca de ingredientes. Viéndolas, se que sus corazones se derretirán. Es tan dulce, mi pequeño hijo. No puedo resistir besarlo en la V de su frente, donde se evidencia su concentración.

Pongo la mitad en el horno y mantengo la otra mitad para hornear cuando Grace y Carrick lleguen. El olor de la cocción de la masa y del mozzarella burbujeante llenan la cocina y lo lleva a través del aire hasta la gran sala, es un aroma que tienta a mi boca que empieza a aguarse.

Mientras saco la bandeja del horno con un Chris impaciente, manteniendo una mirada de cerca, Christian llega de nuevo, esta vez sin Taylor acechando a su espalda. Su camiseta negra está aferrada a su cuerpo resbaladizo por el sudor, de una forma que me dan ganas de morderlo. Sus pantalones de deporte cuelgan en lo bajo de sus caderas sexis, invitando a ser empujados hacia abajo. Parece mucho más relajado y me tengo que concentrar en mantener mi respiración nivelada.

“¡Eso huele increíble!” Hay un brillo claro y tentativo en sus ojos, mientras busca en mi rostro mi estado de ánimo.

Respondo con una sonrisa reservada e igual de tentativa, “eso lo hace, el trabajo creativo de tu hijo” lo levanto del mostrador para que pueda ir hacia donde esta Christian.

“¡Te hice pizza papi!” él salta hasta donde esta Christian y lo guía con su mano. “Ven, ¡come con nosotros!”

Es gratificante ver que Chris a aceptado a Christian de todo corazón y me encanta la forma en la que lo atrae, su mente infantil ya comprendiendo que ellos tienen una relación por construir, tiempo perdido por compensar.

“Eso es fantástico amiguito; ¿Tú hiciste todo esto por ti mismo?”

“No, mi mami me ayudo. ¿Por qué estas tan mojado?” pellizca un pliegue de la camiseta con sus dedos y lo suelta.

“Fui a boxear al gimnasio, ¿debo ir a ducharme primero?” Christian me guiña el ojo, divertido con Chris.

“No, está bien, tu no apestas” Su manera natural de niño -en –que-lo dice- es adorable y Christian y yo nos reímos juntos, derritiendo el frio entre nosotros.

Trato de relajarme durante el almuerzo pero, el reloj virtual tic-toc en mi cabeza me tiene al borde; pronto será el momento de enfrentar a Grace y Carrick. Por un lado estoy dispuesta a acabar con eso de una vez, pero por el otro lado, me encantaría nunca tratar con ellos de nuevo. Que deben pensar ellos de mi!

“Eso estuvo genial amiguito, ¡gracias!” Christian besa a Chris en su mejilla cuando pasa por su lado, camino a apilar el plato en el lavavajillas.

Chris se regodea en el cumplido de Christian y hace todo lo posible para impresionar a su padre aun mas, “hicimos algunas extra, para la abue y el abue”

Christian oye su nota de orgullo y le presta un poco más de atención, listo para probar que él nunca va a tener que pelear por la aprobación de su padre. “Eso es muy considerado de tu parte; se que los hará sentir muy bienvenidos”

La sonrisa radiante de Chris es la recompensa de Christian y me maravillo de cuan perspicaz él puede ser.

La Sra. Taylor estará de regreso el lunes, lo que deja las tareas de limpieza para nosotros. Christian hace de eso un juego con Chris y muy pronto hemos terminado, dejándonos a un momento más cerca del cara a cara con los abuelos, como lo he llamado en mi cabeza.

“Ah, por cierto, mamá dijo que Mia va a venir también esta tarde” Es una declaración casual, como decirme que está haciendo un día soleado –  aparentemente ajeno a mi ansiedad empuñada mientras se aleja en la distancia para tomar su ducha.

¡Genial! Pienso sarcásticamente, otro Grey que adoro decepcionar.

No mucho tiempo después de que Christian se une a nosotros en la gran sala, Collins anuncia la llegada del trío. He hecho todo lo posible para reforzar mis nervios, me he cambiado en un vestido recatado, me he vuelto a re-aplicar el maquillaje y torcí mi cabello en un moño sofisticado, tratando de borrar cualquier referencia que seguramente deben pensar de la Ana voluble.

Para su disgusto estupefacto, Chris ha sido objeto del mismo trato. Él está bañado, peinado y cambiado, luciendo como el nieto modelo para la ocasión. Mientras estamos de pie esperando, resisto las ganas de lamer mis dedos y alisar su cabello alocado, reajustando su ropa – de nuevo y recibo una mirada irritada de él, mis nervios incapaces de dejarme en paz.

Christian toma mi mano cuando caminamos a la antesala para encontrarlos, mi corazón es un tambor rodante en mi pecho mientras me aferro a él como si fuera el aire que necesito para respirar. Él mira a nuestras manos unidas y luego a mí, diversión y simpatía se arremolinan en sus ojos, “Todo estará bien” me tranquiliza.

¡Fácil para él decirlo!

Grace está elegante como de costumbre, auto contenida y me sonríe cálidamente, envolviéndome en un gran abrazo, empujándome hacia atrás por mis hombros y estudiando mi rostro, “Luces maravillosa querida niña, ¡es tan bueno verte!” su afectuosa sonrisa no podía haberme sorprendido más.

Recibo más de lo mismo por parte de Carrick, a pesar de que es un poco más reservado. Mia salta con entusiasmo en frente de mí y me clava a su pecho, “oh Ana, ¡Te he extrañado!”

¿Ah?

Chris tiene los brazos cruzados alrededor de mi pierna, la timidez escondiéndolo detrás de los pliegues de mi vestido, mientras mira a escondidas alrededor de mi lado a los recién llegados.

Cuando Grace lo ve, se pone pálida y su mano vuela a su boca. Amortigua el jadeo maullido mientras sus recuerdos comparan a un Chris saludable con la condición desnutrida de Christian, sin bañarse cuando él llegó a vivir con ellos. Carrick aprieta sus hombros, sin duda alguna, compartiendo el mismo flash back mientras el parecido de Chris a Christian los mira fijamente a sus rostros.

Mia, quien no tiene ningún recuerdo de esto, le da una sonrisa deslumbrante, sus ojos llenos de vida con alegría mientras se arrodilla en frente de él, casi con reverencia, “Hola” es un susurro asombrado y entrecortado.

Su sinceridad lo hace salir de detrás de mi falda y le da un saludo con la mano, mordiendo su labio inferior – aún incierto pero, curioso.

Me agacho a su lado, “esta es la hermana de tu papi, ¡ella es tu tía! Su nombre es Mia.”

“Pero me puedes llamar Mia, solo Mia, ¡tía es para señoras viejas!” ella interviene, pellizcándolo en su estomago juguetonamente.

Él se ríe esquivándola detrás de mí, empezando un juego de escondidas con ella sobre mis hombros.

Cuando ella me ve a los ojos, todo lo que veo es un resplandor brillante de sinceridad. “Él es guapísimo Ana, ¡bien hecho!”

Su absoluta falta de ira hacia mí, me ha dejado perpleja y siento la opresión de inquietud crecer en la boca del estomago.

Mia se levanta y envuelve a Christian en uno de sus abrazos de cuerpo completo y luego lo golpea en el brazo, “¡eres un cabrón, lo sabes!”

“Hola a ti también Mia” En su manera usual con ella, él la mira con diversión indulgente.

¿Qué está pasando aquí?

Es el turno de Grace y Carrick de conocer a Chris, ahora que han tenido tiempo de recuperarse. Con la emoción aún espesa, tocando justo debajo de la superficie. Ambos se agachan para conectarse con él a su nivel.

Carrick es el primero en hablar, “hola joven” él extiende su mano y se la ofrece a Chris. Él duda solo por un instante, antes de devolver el saludo a su abuelo con entusiasmo, agitando su brazo hacia arriba y hacia abajo, disfrutando la novedad de ser saludado como un adulto.

“Hola” junta sus manos en frente de él y mueve los hombros de lado a lado. Cuando ve la alentadora sonrisa de Carrick se arriesga a hacer una pregunta, “¿tu nombre es abuelo?”

Carrick lanza su cabeza hacia atrás con una gran carcajada, finalmente perforando la incomodidad, proporcionando el rompe hielo perfecto.

“No, mi nombre es Carrick pero, tú me puedes llamar abuelo si quieres” Él le guiñe a Chris y busca la mano de Grace.

“Y esta” su cálida mirada afirmativa y reconfortante una vez que ha mirado a Grace, “es tu abuela, Grace”

Grace está intentando lo mejor que puede por mantener una sonrisa alegre pero, otra ola de sentimientos la envuelven. El instinto se apodera y ella lo envuelve con sus brazos alrededor de él, impotente para luchar contra la subida de la marea.

Estoy asombrada y humilde al amor instantáneo para él. Grace está llorando abiertamente, presionando a Chris hacia su cuello, acariciando su cabello y besándolo una y otra vez. Veo a un pequeño brazo un poco indeciso enroscarse alrededor de su hombro para acariciar suavemente, tranquilizándola.

La maldita pared que servía de contención para mis emociones durante los últimos cinco años, se agrieta y luego se rompe, rompiendo todas mis defensas en un chorro imparable. La culpa, la vergüenza y el arrepentimiento inundando las riberas de mi ser, barriendo con todo a su paso, es poderoso y forzando a mis lagrimas derramadas.

Apenas puedo respirar contra la exhalación aplastante. Es solo el abrazo protector de Christian que me ancla, estaría agradecida si tuviera la capacidad de hacerlo en estos momentos.

En ese momento, mi arrepentimiento quema tan caliente, tan cierto que siento su marca. ¿Cómo podré explicar? Arrastro mi respiración pronunciando una disculpa tartamuda y temblorosa. “Yo…Lo siento mucho” se que tan lastimosamente inadecuada es, su perdón es mucho más de lo que merezco.

Grace laza su rostro lleno de lagrimas y se levanta con Chris en sus brazos, junto con Carrick y Mia, se mueven para envolvernos y nos adentra en un abrazo familiar.

Cuando finalmente nos separamos, reajustándonos a la nueva forma de nuestras emociones, que se han asentado, Chris es el que tiene algo en la cabeza, “ustedes me pueden llamar Chris,” su pulgar apuntando con orgullo en su pecho.

Es como la respiración de limpieza para nosotros, su peculiar sentido del humor que nos hace sonreír, sonrisas reales, mientras nos damos cuenta que ninguno de nosotros se molestó en presentarlo.

Nos congregamos en la gran sala, tomando asiento y empezamos el viaje de recuperarnos y de volver a conectarnos.

Les ofrezco una ronda de bebidas y me marcho a la cocina para poner las pizzas de Chris en el horno. Cuando empiezo a preparar el café, Grace se une a mí, “Ana, él es un niño tan precioso; hiciste un gran trabajo con él” Como madre de tres hijos fantásticos, su comentario me halaga pero, aun no puedo evitar o explicar el nudo apretado de incertidumbre que siento por su cálida bienvenida hacia mí.

“Gracias Grace, él es un placer, lo disfruto mucho”

Después de un golpe de silencio incomodo, ella comienza, “Niña querida, sé que esto es fuerte; y aún más difícil hablarlo pero, por favor” sus ojos preocupados imploran a los míos, “No dejes que el comportamiento imprudente de Christian se interponga entre nosotros. Él sabe que cometió un gran error, solo estoy agradecida que él eventualmente ha recapacitado. Si él tan solo hubiera venido a mí, hablarme, podría haber puesto las cosas en perspectiva para él” Su mano descansa ligeramente sobre mi antebrazo, puntualizando su sinceridad, pero es que no tengo idea de lo que está hablando.

“¿Puedo ayudarte con la bandeja Anastasia?”  Christian interrumpe antes de que la oportunidad de averiguarlo.

“Uhm, sí, claro. Gracias” Deslizo la bandeja sobre el mostrador para que él la tome y por razones desconocidas, me sonrojo. Él nos mira a nosotras con el ceño fruncido y esa mirada gris, luego mira a su madre, así que ella no tiene más remedio que seguirlo de vuelta a la gran sala.

Cuando las mini pizzas están listas, llamo a Chris para que venga y tenga el placer de caminar por ahí con el plato a servir, ofreciendo su creación. Su orgullo es adorable y todos están completamente atontados con él. Toda la escena es conmovedora, mi corazón apretado por todo el amor que lo rodea; él ha traído una medida extra de felicidad a sus vidas.

La conversación es sobre todo acerca de Chris y él es pasado de un Grey al otro, sentado en sus regazos disfrutando de la atención. El tema cambia al día de su nacimiento y la Dra. Grace me perfora con su mirada por los detalles. De vez en cuando observo la expresión de Christian, la cual está guardando con cuidado pero, cuando he contado la historia de la cesárea de emergencia que tuve cuando el bebe Chris estaba en peligro, su horror es inconfundible. Él agarra mi mano, atrayendo la atención de toda la familia, quienes miran a nuestras manos entrelazadas con asombro. El rubor corriendo por mi rostro acompañado de un encogimiento.

Mia llega al rescate y comparte sus noticias que me he perdido los últimos años. Ella abrió su propio Bistro pequeño, el cual por supuesto está rugiendo pero, ella aún está soltera, “buscando el Sr. Correcto” bromea pero, la sombra pasando su mirada está en desacuerdo con su tono ligero. Me pregunto qué pasó entre ella y Ethan.

A mi lado Christian endereza sus piernas y se inclina a un lado para agarrar el teléfono del bolsillo de su pantalón. Está obviamente en tono silencioso. Él mira la pantalla, luego se excusa para tomar la llamada en privado. Sus zancadas largas lo llevan a la soledad de su estudio en tiempo rápido.

Espero sean noticias útiles sobre nuestra situación – de – amenaza.

“Ana, se que todo es muy nuevo pero, si alguna vez tú necesitas a alguien para cuidar a este pequeño ángel – por cualquier razón – por favor tómanos en cuenta” ella le da a Carrick un apretón cálido donde descansa su rodilla, una mirada amorosa paseándose entre ellos. “Ha sido un largo tiempo desde que hemos tenido pequeños pies golpeteando alrededor de la vieja casa”

Sonrió tan sinceramente como puedo, ¿Cómo me puedo rehusar? “¡Voy a hacer eso! Gracias”

Cuando Christian regresa, la tensión alrededor de sus ojos es clara y él está vibrando con una tranquila e hirviente ira.

¡Dios mío!

Carrick toma la señal “Creo que hemos agotado a este pequeño hombre lo suficiente por un día” él le guiña a Chris y le hace cosquillas, mientras se levanta y sostiene una mano para Grace.

Todos se ponen de pie y veo el endeudado pero discreto movimiento de cabeza de Christian con su padre. Mia aleja con el codo a Grace fuera del camino, para ser ella quien cargue a Chris hasta el ascensor y está claro que ella se ha estacado en el papel de tía extravagante y favorita con gran regocijo.

Con abrazos por doquier y una promesa de vernos pronto, todo el mundo está más a gusto excepto por mi; sigo siendo incapaz de liberarme del sentimiento de que algo no está del todo bien.

La mano agitada de Christian pasa a través de su cabello cuando las puertas de ascensor se cierran y con la otra se pellizca la nariz. El gris en sus ojos luciendo sombrío.

“¿Qué te pasa?” pregunto, con la esperanza que por una vez no sea yo.

“¿Podemos hablar?” él mira a Chris y sé que quiere decir a solas.

“Claro, voy a conseguir algo para que él haga” el asienta con la cabeza y se dirige a su estudio.

Instalo a Chris con un juego en el iPad y me siento como una oveja dirigiéndose a la masacre cuando voy a donde está Christian. La oración silenciosa para que él no esté molesto conmigo de nuevo es un canto en mi cabeza.

Un golpe cauteloso de mi parte en la puerta abierta lo alerta de mi presencia y, tan galante como siempre, se levanta hasta que tomo asiento frente a él. “Necesito preguntarte algo y tienes que ser completamente honesta conmigo, piensa realmente bien, esto es importante” Empieza sin preámbulos.

“Está bien” los alborotos del miedo empiezan un baile lento en mi estomago. Todas las dudas del perdón y aceptación poco realistas de sus padres abandonan mi mente.

“¿Alguna vez has mencionado mi, uhm… estilo de vida a alguien, lo has comentado con alguien?”

Niego con la cabeza; esto es algo de lo que estoy definitivamente segura, “aparte de Kate, quien ya tu sabes se enteró, nunca he respirado una palabra”

“¿Ni siquiera a Jose?” su boca torciéndose cuando menciona el nombre de Jose.

“No Christian, nunca, ni una sola palabra” Mi cabeza negando enfáticamente al mismo tiempo.

Sopla un largo suspiro, se desploma hacia atrás en su silla y pasa una mano por su cabello.

“No es Kate, cualquier escándalo que me rodee, será un escándalo para ellos también y ella nunca me traicionaría de esa manera” Él es laborioso, casi hablando consigo mismo.

¿Kate será parte de un escándalo que rodee a Christian? ¿Christian confía en Kate?

“¿Qué está pasando?” el miedo empujando temor por mis venas.

“La llamada anterior, era de Welch. Ha sido informado por alguien de nuestra confianza que un “reportero” ha estado husmeando, tratando de entrevistar a miembros de un club exclusivo de BDSM al cual solía pertenecer. Preguntando por mí. Parece que está trabajando en una revelación” Hay una amargura en la cadencia de su voz.

“¡No!” mis dedos vuelan al hueco de mi garganta, “¿Crees qué esté conectado con el mensaje en tu oficina y el intento de robo en mi casa?”

“Es difícil de decir, pero debe ser más que una coincidencia que todo esto esté pasando en el mismo momento. Barney ha pautado una entrevista con el reportero, haciéndose pasar por miembro del club, para tener acceso al disco duro de la persona, lo raro es, él no es quien dice ser. La publicación donde él asegura que trabaja, nunca ha oído nada sobre él y no podemos encontrar ningún registro de ser un profesional independiente”

“¿Y? ¿Has visto lo que tiene hasta ahora, a lo mejor eso te lleve a sus fuentes?” me concentro en mantener mi tono, a pesar de mi corazón desbocado.

“No, estoy esperando a que él me escriba” él está tranquilo por un rato, luego me sorprende continuando, “las cosas se han vuelto un enredo con las negociaciones coreanas, estoy tomando las riendas de una planta de energía mal gestionada, con un puñado de directores corruptos que están planeando en votar en contra de mi toma de posesión. Un escándalo como este, les dará la munición para acabar con el acuerdo. La empresa va a ir cuesta abajo; los miembros de la junta directiva van a ganar millones en subvenciones del gobierno, mientras miles de personas perderán sus puestos de trabajo”

No es primera vez que se me ocurre que él lleva una inmensa responsabilidad sobre sus hombros. Ser responsable de las cuentas de tantas personas debe ser lo suficientemente estresante pero, la presión en la que se pone a si mismo lo supera, nunca parece fallar. Es admirable y exige respeto, sexy como el infierno – este hombre poderoso y sereno.

“¿Corea del Norte o del Sur?” pregunto, con la esperanza de ser informada.

“Del Sur, en Seúl” me responde, mirando hacia abajo y pálido.

Nos mantenemos en silencio por un rato. Dando vueltas a la información reciente.

“Los miembros de este club, ¿confías en ellos?” mi pregunta trae de vuelta sus ojos a mí.

“Si, les tengo confianza, ellos tienen mucho que perder si hablan, muchos de ellos son prominentes en el mundo de los negocios. Estoy más preocupado de donde él obtuvo el punto de partida. Este es un club muy privado, no es la clase de cosas que puedes buscar en las páginas amarillas” su boca forma una línea torcida, “solo se entra con estrictas referencias”

Su ping de correo electrónico anuncia que le ha llegado un mensaje y él se sumerge en los hechos, haciéndome sentir sobrante, “hazme saber si hay algo que pueda hacer para ayudar. ¿Está bien si preparo a Chris para ir a dormir?”

“Si, por supuesto. Discúlpame Anastasia” sacude su cabeza, aclarándola, disculpándose por perderse a sí mismo en la tarea, “seguro, prepáralo, yo iré a leerle una historia cuando hayas terminado”

Voy con las funciones de preparar a Chris, bañándolo y lavando sus dientes pero, mi mente está con Christian, preocupación carcomiendo mi paz.

Chris arrastra a Christian de su escritorio para la hora del cuento y por un corto tiempo nos olvidamos de la invasión del mundo exterior. Después de muchos abrazos Chris se asienta y explaya una sonrisa feliz y dormilona para nosotros, mientras se entrega a su sueño.

Siempre me sorprende como Christian puede compartimentar sus sentimientos. Sé que está preocupado por los últimos acontecimientos pero, no lo sabrás cuando lo ves a él estando con Chris.

“¿Alguna novedad?” pregunto, una vez que hemos cerrado la puerta y caminando de regreso a la gran sala.

“No mucho, no. Hasta ahora parece que ha llegado con las manos vacías respecto a mí, excepto por la información que es de conocimiento público pero, él tiene una lista de contactos, Barney, va a cruzar las referencias con nuestra base de datos a ver si algo coincide”

Asiento con la cabeza; un poco desconcertada con sus recursos. “¿Puedo ofrecerte una copa de vino?”

“Por favor Anastasia”

Nos sirvo a ambos una copa y salgo de la cocina mientras Christian se sienta en el rincón del mesón de desayuno. Siento que su mirada me sigue alrededor y hace que mi sangre se caliente, expandiendo un rosa brillante en mis mejillas.

Me hace sentir desnuda, expuesta así que rompo el silencio con una pregunta que está rodando en mi mente, “Tu mencionaste a Kate antes; tu obviamente aun tienes contacto con ella” soy muy gallina para preguntar directamente; lo expreso de manera que él pueda llenar los espacios en blanco.

“Si, ella está casada con Elliot ahora. Ellos han estado en Holanda los últimos dos años, trabajando en una empresa conjunta con la Unión Europea y diversos organismos de ayuda para lograr un diseño de una vivienda ecológica que pueda ser producida en masa, ensamblada de forma rápida y que pueda ser trasladada a cualquier lugar, en los campos de refugiados, zonas de desastres naturales, tu sabes, ese tipo de cosas” su mano hace un gesto vago que indica que abarca todo.

“Guao, eso es genial” Esa es otra persona que estoy temiendo enfrentar. En mi determinación inquebrantable de esconderme de Christian, la evite a ella junto con todos los demás. Sé que ella debe estar súper molesta conmigo, cancelando nuestra amistad de esa forma. Espero que ella pueda entender que yo no quería poner en riesgo su relación con Elliot y que la puse en una posición donde le iba a ser imposible escoger.

Él me mira con curiosidad, al oír mi falta de convicción, “puede que te sorprenda que Kate y yo nos hemos hecho amigos. Después de que te fuiste, ella era la única conexión que tenia contigo…” se desvanece y se encoge de hombros, volteando su mirada, observando a la distancia.

Es difícil escuchar que mi ex mejor amiga y mi ex esposo lloraron sobre los hombros el uno del otro. Me doy cuenta de lo mucho que la he extrañado, nunca he pensado de ella como una ex amiga, solo como una amiga ausente.

“Te ves cansada Anastasia, ve a dormir” la preocupación en su rostro toca las profundidades de mi corazón pero, sé que no significa nada si no lo puede ver él mismo.

Arremolino lo ultimo del vino en mi copa y lo bebo, “Lo estoy. Tal vez las cosas se vean mejor en la mañana”

Ayer por la noche me sentí esperanzada, nuestra potencial relación floreciendo con posibilidades pero, esta noche me siento desanimada. “Buenas noches Christian” Cuando paso por su lado le doy un pequeño apretón en lo que sé que es un bíceps hermosamente definido, sin esperar a ver su reacción mientras continuo por el pasillo hacia mi habitación.

Me siento un poco mejor después de un baño y hago un último viaje a la cocina por un vaso de agua antes de acostarme – esta vez con mi kimono de seda negro atado con seguridad por encima de mi bata reveladora. No quiero correr riesgos.

Todas las luces han sido apagadas excepto por la franja brillante del estudio de Christian y los péndulos sobre la isla de la cocina. Me sirvo un vaso de agua y me la tomo de un tirón. Cuando volteo para irme, Christian está parado detrás de mí, haciéndome saltar y agarro mi corazón con miedo.

Él está sosteniendo una hoja de papel en una mano y a pesar de la oscuridad puedo sentir la intensidad de su rabia. “Me asustaste” mi voz es un susurro silencioso, mi boca, seca de repente otra vez.

Él lanza la hoja en la isla, bajo las luces pero no dice ni una palabra. Mis ojos saltando del él al papel y luego hacia él de nuevo, finalmente dándome cuenta de que él quiere que lea la pagina. Me acerco, mirando a las palabras impresas. No reconozco el logo pero, le diseño indica que es algo medico. Es un estado de cuenta de algún tipo, gastos enlistados, uno bajo el otro. Mientras leo hacia abajo en la lista mis ojos frenan en el que está en un circulo en rojo, deteniendo mi respiración.

Lo siento detrás de mí, “¿esto es por él Anastasia? ¿Deseas al puto doctor?” su tono acusatorio puede solo ser descrito como un gruñido.

Cierro mis ojos contra la rabia creciente, ¿Cuándo va él a aprender? Me giro y lo miro a sus ojos, sin vergüenza y atrevida. “No”

“¿Por qué entonces? ¿Por qué tener un DIU?” (Dispositivo Intrauterino) el acero de su mirada está atornillando la mía, implacable.

“¡Eres un idiota!” volteo la mirada, consciente de que voy a tener que explicarlo todo pero, cada fibra de mi ser se rebela contra ello.

Su cuerpo me tiene presionada mientras el agarra mi barbilla para mover mi cabeza, capturando mi mirada de nuevo. Yo sobresalgo mi barbilla en forma de desafío, “¡Es por ti!” escupo las palabras que debieron haber tenido un tono romántico.

Sus ojos se abren en estado de shock pero, antes una sombra peligrosamente perversa de lujuria quema su ira.

En menos de un segundo mis dos manos están aseguradas en su agarre de hierro, mientras la otra mano desata la bata con soltura. Una mano ardiente se desliza sobre la suave tela de mi túnica encendiendo una estela de fuego a su paso. Su boca caliente aplasta la mía, magullando y consumiéndome. Entre lamer mi boca y tomar una respiración, su susurro gruñendo retumba en mi interior, “¿es esto lo que quieres Anastasia?”

Mis sentidos atontados están en sobrecarga, las neuronas disparando en una sola dirección mientras el fuego y el deseo se derriten en mi entrepierna, “Ahhh… si”

“¿Y esto?” su mano se desliza por la tira fina de mi hombro y cae revelando un pezón apretado, en un seno lechoso gritando por atención. Sus dedos hábiles aliviando el sufrimiento con un pellizco fuerte, antes de agarrarlo completo, amasándolo brutalmente.

Solo puedo jadear en su boca, ya sin ser capar de articular un solo pensamiento. Él se empuja hacia mí, meciendo sus caderas y su gruesa erección contra mi sexo.

Echo mi cabeza para atrás, buscando algo de aire, mi cuerpo sin uso ante la estimulación abrumadora. La boca hambrienta de Christian encuentra mi cuello, “¿y esto?” su mano patinando sobre mi piel de gallina en mis muslos, mientras agarra mi trasero y levanta mi pierna, dejándola sobre su cadera.

El sonido que hace cuando su mano se encuentra con mi piel desnuda, sin la barrera de la ropa interior, hace que mi necesidad por él se salga de control. Su mano se pasea alrededor, imparable y con ganas de explorar entre nosotros y en los labios hinchados de mi sexo, “Ana” el sonido es primitivo – dolido y torturado. Siento como su cuerpo se pone rígido mientras él detiene todas sus caricias, envolviéndome en un abrazo triturador de huesos, enterrando su cabeza sudorosa en mi cuello y respirando fuerte.

“¿Qué demonios?”

Me arrastra lejos de mi liberación como agua helada, todos mis sistemas en alerta máxima. Me aferro a él con todas mis fuerzas mientras mi propia respiración entrecortada suena en mis oídos. Nuestra reunión y la promesa de la liberación de nuestro sufrimiento yéndose lejos con cada latido de la desaceleración de nuestros corazones.

Cuando levanto su rostro hacia el mío, encuentro angustia. “¿Es esto lo que quieres?” pregunto amablemente, sin estar segura de donde estamos.

“Mierda Ana, no lo sé. No sé qué hacer. Pierdo todos mis sentidos a tu alrededor” su tono es suplicando, implorando mi ayuda, aunque, no estoy segura de que pueda hacer.

“¿No puedes ceder a nosotros?, ¿admitir que esto es lo que quieres?”

“Estoy aterrado Ana, ¿no entiendes? ¿Qué pasa si lo jodemos de nuevo? ¿Perderlos a ustedes dos? No voy a sobrevivir”

Mierda, es a eso lo que todo se reduce, la confianza rota. No, rota aun podría arreglarse, esto es la confianza hecha añicos.

Su honestidad me quita el aliento. “¿Qué tal si pudiera probarte de que no me voy a ir corriendo?”

Él sacude su cabeza, ojos confundidos y el ceño fruncido, sin entender.

“Tengo algo para ti, algo que redacté, solo para ti. Por favor léelo, eso lo explicará” espero por su asentimiento, luego corro hasta mi habitación para buscar la copia impresa de mi contrato.

Si esto no funciona, estoy quedándome sin ideas. No creo que vaya a ser capaz de intentarlo ante la cara todopoderosa de su resistencia.

He agregado algunas cosas para hacerlo lucir autentico, incluso sellando el sobre con un sello de cera roja; solo espero que no piense que es estúpido. Voy hasta su estudio, donde se que me está esperando – su territorio – el asiento de su poder. Su espalda está dando hacia mí, perdido en las luces brillantes como la tinta de la noche de Seattle.

Mi corazón se hunde, cuando al voltearse se revela su rostro impasible, una guardia cuidadosa en su mirada

Oh-oh

“Esto es para ti” trago más allá de la incomodidad, “es un contrato que ya he firmado, lo que puedes esperar de mi” Mis palabras tienen el efecto deseado, mientras veo como el reconocimiento al que él estaba acostumbrado alguna vez, corta efectivamente a través de mi ironía

Él toma el sobre y lo voltea sobre su mano, viéndolo como si fuera una cosa extraña.

“Esto es todo Christian, aquí, ahora. Este es el momento y quiero que estés seguro, que sepas, que yo te elijo, que nos elijo” mi murmullo cargado con sentimiento, deseando de que él también me elija.

Este es el último aliento que él necesita para sentarse y abrir el sobre.

Contrato de acuerdo entre Anastasia Rose Steele y Christian Grey.

Este es un contrato celebrado por Anastasia Rose Steele (en lo sucesivo, referida como “la Novia”) y Christian Grey (en lo sucesivo referido como “el Novio”) en esta fecha:__________

La Novia se compromete de ofrecer al novio los siguientes compromisos de una manera obligatoria y manera dispuesta, con el fin de traer tranquilidad y certeza romántica al Novio, dentro de los límites de una relación amorosa y comprometida. 

Este Contrato Sirve para Estipular los Siguientes Términos de Expectativas:

  1. 1.      La Novia siempre se esforzará por ser honesta con el Novio, comunicándose abiertamente con el fin de proporcionarle al Novio un claro entendimiento de sus necesidades, deseos y emociones.
  2. 2.      La Novia se compromete a nunca dejar esta relación por ninguna razón, excepto por el expreso deseo del Novio.
  3. 3.      La Novia se compromete a consultar a un especialista de la elección del Novio para ayudarla a abordar sus inseguridades y se comprometerá a las medidas necesarias establecidas por dicho especialista con el fin de superar estas inseguridades.
  4. 4.      La Novia necesitará una “palabra de seguridad” a elección del Novio, para  cuando ella este más allá de los límites que él considere aceptables.
  5. 5.      La Novia obedecerá al Novio en todas las cosas, excepto cuando el Novio esté siendo arrogante e irracional.
  6. 6.      La Novia promete no desafiar las peticiones del Novio, excepto cuando ella lo considere necesario.
  7. 7.      La Novia va a comer tan a menudo y tan saludable como pueda pero, el Novio no lo considerará como una falta de ella, si ella no lo hace en alguna oportunidad.
  8. 8.      La Novia se compromete a dormir regularmente con calidad pero, si la novia no puede hacerlo el Novio será comprensivo.
  9. 9.      La Novia estará encantada con cualquier accesorio que el Novio desee regalarle, ya sea ropa, joyas, automóviles o cualquier otra cosa que le parezca.
  10. 10.  La Novia se compromete a un régimen de ejercicios de la elección del Novio, de tres horas a la semana, siempre que ella tenga tiempo al acceso del cuidado su hijo.
  11. 11.  La Novia se someterá a cualquier tratamiento de belleza considerado necesario por el Novio sin la menor protesta.
  12. 12.  La Novia respetará en todo momento y prestará atención a las necesidades del Novio de mantenerla a salvo, haciendo el mayor número posible de ajustes razonables con el fin de ayudarlo a confiar en su juicio.     
  13. 13.  La Novia no va a involucrarse en cualquier relación sexual con otra persona que no sea el Novio y reconoce que su comportamiento es un reflejo directo del Novio.

El incumplimiento de cualquiera de los anteriores dará lugar a un castigo de inmediato, cuya naturaleza será determinada por el Novio.

Este contrato se regirá por las leyes de nuestra relación.

Declaración de cierre para definir el espíritu de este contrato:

Christian Grey, te amo y quiero ser lo que tú necesitas, tu salvación, tú todo. Estoy firmando este contrato con mis ojos bien abiertos, aceptando todas las cosas que vienen contigo. Déjame amarte. Con esto, te doy mi corazón entero, sin reservas, porque te lo confío. Rompí mis votos matrimoniales una vez por razones que pensé eran altruistas en ese momento, pero, ahora revoco mi derecho de irme, total y completamente sin dudar nada. Con esto, espero mostrarte mi certeza absoluta en nuestro futuro.

Firmas de las partes involucradas:

 

Anastasia Rose Steele                                                         Christian Grey

 

Mientras su cabeza esta inclinada sobre el contrato, concentrándose, el silencio pica mis oídos. Siento que quiero moverme pero, no quiero distraerlo. Largos minutos pasan, que no hacen nada para calmar mis nervios encadenados. Cuando finalmente levanta su cabeza, siento el golpe en mi estomago, la quemadura seca en la garganta.

De todas las expresiones que estaba esperando, la incredulidad estupefacta fue la última que esperaba. “¡¿Tú crees… que yo te quiero… como mi novia?”

Link para el capitulo 16

 

 

12 thoughts on “Capitulo 15

  1. FANNY REBELLON BOLIVAR says:

    Este capitulo es muy intenso, primero el dr tan abusivo, besarla en la boca como si fuera lo mas natural, luego la visita de los grey y luego lo del diu ja ja genial me encantan las reacciones de cristian gracias monique y mil gracias kereny por tu excelente traducción un beso madre.

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  2. Farley says:

    Me encanta esta historia. Gracias por la traducción.
    Esperare con ansias el siguiente capitulo.
    Saludos a Monique y Kereny

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  3. Janitzia Berrido Fernandez says:

    Estupendo capítulo, muy emocionante. Por fin Ana entendió que el problema de Christian es que no le tiene confianza y cree que ella se puede volver a ir. Algo lógico y normal, después que te vas y desapareces por 4 años Ana. Y sabiendo los problemas extras que lleva Grey. Me reí muchísimo con el contrato y más con lo que Christian le dijo al final a Ana. Y tu crees que te quiero como mi novia? ja,ja,ja…Adoro a Christian!!!!Gracias por su trabajo las admiro….

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    • KereCB says:

      Janitzia gracias por el apoyo! y por continuar leyendo el FF… Fueron 5 largos años…. y si Christian tiene una forma muy particular para todo….
      Un abrazooooo

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  4. milethgreyy says:

    me encanto pero que le pasa a ese doctor xd como se atreve a besarla en la boca y a Christian que le pasa deja a la pobre con ganas esto esta mas que loco xd y eso que le dijo que si al caso el la queria como novia eso quiere decir que no la va aceptar hay no que angustia xd excelente capitulo guapa saludos

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  5. Felia says:

    estoy tan emocionada, que quisera leer todo de una vez. jaja. Muy Bueno

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