Capitulo 51

Girando el mango de la puerta, siento un escalofrío de emoción, me entra con una fuerte corriente de miedo. Si no estoy embarazada ¿Christian me va a culpar? Si la primera ronda de hacer un bebe fue llevada a cabo bajo la precisión militar de una guerra, ¿Cómo sería la ronda numero dos? ¿Me uniré a Kate en la clínica de fertilidad?

Mi mente se distrae con pensamientos del regalo que tengo para Christian. Estaba planeando dárselo el día del lanzamiento del artículo de la revista GQ pero, de repente parece importante que lo haga en este momento, antes de que sepamos los resultados de las pruebas de embarazo.

Cuando abro la puerta él me atrapa por la cintura, levantándome del suelo y aplastándome hacia él, sonriendo para mí y llevándonos de vuelta al baño.

Me rio, a su merced, y acogida por su entusiasmo, “¡Espera! Espera un minuto, ¡necesito buscar algo!”

“Todo lo que necesitas está justo aquí nena” dice, su voz lenta y baja, cálida mientras presiona mi cuerpo hacia el suyo.

La verdad de sus palabras me llega. Mi mundo es con él y Chris, y tal vez un segundo bebe. En el gran esquema de las cosas hay muy poco más que pueda importar.

Sonriendo ampliamente dejo caer un beso en su boca, “Tienes razón” le digo, taladrándolo con mí mirada azul clara, “Tú y Chris lo son todo para mí, pero tengo algo que darte antes de que veamos esas pruebas.”

Con mi barbilla apunto en dirección a las pruebas de embarazo que esperan.

La forma en cómo se ilumina su rostro es simplemente espectacular, como un niño en navidad. Me encanta como Cincuenta – en todas sus sombras – puede todavía ser tan inocentemente expresivo conmigo.

Después de un beso sonoro me baja, volteándome por mis hombros y me da una nalgada en mi trasero, enviándome fuera de la puerta, ”¡Entonces, no me hagas esperar Sra. Grey!”

Riéndome me dirijo a muestra habitación, encontrando la pequeña caja en mi mesita de noche. Puede que sea pequeña pero lo que le falta en tamaño lo compensa el sentimiento de unión. Es mi manera de dejar mi propia marca de posesión en Christian cada día.

De vuelta en el baño estoy impresionada que Christian está esperando por mí, de espaldas a las pruebas – aunque con impaciencia – saltando de un pie al otro. Nunca lo había visto zumbando así, lleno de energía inagotable. En todo caso, su comportamiento es un estudio de control cuidadosamente controlado.

Su sonrisa cuando entro, su mirada mercurial que cae en la pequeña caja de terciopelo color rojo sangre en mi mano, y luego su cuerpo se queda quieto. Me encanta como, a pesar del hecho que él está muriendo por saber los resultados de las pruebas, me da su atención completa, su enfoque indivisible y nítido.

Agarrando su mano que descansa a su lado le dejo la caja de terciopelo en su palma, agarrando su mano con las mías.

Me toma un minuto poder formular las palabras. Hay tanto para transmitir y quiero expresarme claramente, decir todo lo que sé que él adora oír de mi, simplemente porque él lo merece, pero también porque es verdad.

Levantando mi mirada encuentro sus ojos buscando en mi rostro, su expresión seria, siempre en sintonía con la ligereza de mis emociones, “Christian, cuando nos volvimos a casar nunca tuve la oportunidad de escoger un anillo para ti. Quería hacerlo, para que usaras algo que supieras que yo escogí, pero también porque éste lleva una marca de mi.”

Dejo caer mis manos, dándole una sonrisa alentadora, dejándolo abrir la caja por sí mismo, y permitiéndole al regalo que diga las palabras que parecen insuficientes. No estoy segura de porque estoy tan nerviosa. Este es exactamente el tipo de gesto que lo va a conmover porque entendería el acto de posesión detrás de él, la declaración que estoy replanteando.

Lo veo, viendo los cambios que lavan su rostro hermosamente expresivo, asegurándome de cauterizar sus reacciones en mi memoria. Son momentos como estos que conforman el banco de los recuerdos a los cuales miramos de nuevo y nos vemos bendecidos, felices.

Sus ojos brillan, el mercurio cambiando a un color plata luminoso en reconocimiento del anillo de bodas de platino antes de que una pequeña mueca frunce su frente. Intrigado, inclina su cabeza, levantando la promesa de su hendidura ajustada, inspeccionando las líneas arremolinadas en la superficie. Su jadeo es la respuesta final y la más gratificante, el significado del anillo y su diseño golpeando el entendimiento.

Su mirada se clava en la mía, feroz con algo más que amor, “¿Estas… estas son tuyas?” pregunta, refiriéndose a las huellas digitales reveladas en la parte plana del precioso metal.

Trago, luego sonrío, asintiendo tontamente. Debí haber anticipado su reacción intensa, pero en su lugar estoy impresionada por la profundidad de sus sentimientos.

51a

“Ana” dice con una voz áspera, su ser vibrando con una urgencia repentina.

Dejando caer la caja al suelo presiona el anillo en mi mano. En otro movimiento fluido se quita el anillo que tiene, lo mete en el bolsillo del pantalón – más bien de manera brusca – antes de extender ligeramente su mano izquierda temblorosa ante mí.

“Por favor, pónmelo” no hay duda de la nota de suplica en su voz, el borde de casi desesperación por llevar mi regalo, de someterse al simbolismo de este compromiso mortal interminable.

Con nuestras pruebas momentáneamente olvidadas, y viendo a los ojos grises ardientes de mi esposo imposiblemente hermoso, lo deslizo, su inhalación haciendo un silbido suave, casi como si doliera.

“Mío” murmuro sin aliento, con la carrera de mi corazón antes de inclinarme hacia adelante para sellar el símbolo de nuestra unión con un beso donde es enlazado alrededor de su dedo.

Sin siquiera un parpadeo, su mirada está brillando con amor, me abraza hacia él, nuestros cuerpos fundidos.

“Mía” él repite, casi gruñendo cuando imita mi gesto, también presionando mi anillo contra sus labios.

Ni un segundo después su boca está sobre la mía, el te amo que estaba en la punta de mi lengua se desvanece por un beso tan feroz que me hubiese noqueado si no estuviera soportada por el fuerte abrazo de Christian.

El beso habla de su dominancia, de la fuerza tremenda de su voluntad, y el amor incesante que tiene en el vasto espacio de su infinitamente corazón amoroso, pero más que todo, grita su rendimiento a mi mandato, a mi título como su esposa que estoy empezando a reclamar más y más agresivamente.

Capturados en el momento de este viaje completo – en circulo que hemos viajado, la claridad se filtra a través de mi bruma de enamoramiento. Para mi poseerlo y expresar esa propiedad – en cualquier manera – es igualmente, si no más importante para él que su posesión de mi. Me hace deleitar en la forma perfecta de su boca, la caricia de terciopelo de su lengua profunda en mí. Me emociono sabiendo que le puedo dar esto a él, una cosa tan simple que tiene un efecto tan profundo en él, y junto con la reiteración de mis votos de matrimonio que él ahora lleva en su dedo, me prometo a mi misma demostrárselo más seguido.

Él gruñe alejándose de mí, su pecho subiendo y bajando rápidamente con sus respiraciones apresuradas, “Te amo” dice entre dientes, completamente consumido por el sentimiento.

Con mis manos, tomo su rostro, amando la familiaridad de los contornos bajo mis palmas cálidas, “Yo te amo más”

Radiante con algo más que mi sonrisa lo miro, deleitándome con su sonrisa atontada.

“Gracias” dice con seriedad antes de plantar un beso en mi frente, sus manos grandes manos ahuecando mi mandíbula con una ternura que siento en mi alma.

Me inclino ante su toque, golpeando su pecho con mi dedo, y a tiempo con mis palabras, “De. Nada”

Riéndose me presiona hacia él otra vez, sosteniéndome firmemente. Por minutos nos quedamos así, solo estando juntos, disfrutando de nuestra dosis de ser completamente felices antes del próximo viaje salvaje inevitable por el que nos ha lanzado nuestras vidas.

“Entonces, Sr. Grey, estoy bastante segura que nuestros cinco minutos de espera han terminado. ¿Te sientes lo suficientemente valiente para enfrentar el estado de mis hormonas?” pregunto, mi mejilla todavía presionada contra su pecho.

Encuentro sus labios curvados con un arco distintivo de confianza cuando miro hacia arriba, “Una mera formalidad Sra. Grey.” Bromea, su estado de ánimo mercurial cambia haciendo camino para el Christian engreído.

Me río, mi cabeza echada hacia atrás, “¡Ay hombre, espero que la madre naturaleza no vaya a morderte en el trasero!”

Su mano hace un sonido de chasquido cuando la golpea contra la curva de mi trasero, teniendo un gran agarre de mi nalga, “Pfff” descarta, “La madre naturaleza me ama, y si alguien va a morder el trasero de alguien voy a ser yo – ¡que voy a morder el tuyo!” advierte con una voz baja y provocadora, moviendo sus cejas juguetonamente.

Sacudo mi cabeza, riéndome y serpenteo mi brazo alrededor de su cintura, “¿Vamos a ver lo que ella tiene que decir al respecto?”

Conmigo a su lado, damos unos pocos pasos hasta la barra juntos, mi corazón repentinamente rebotando en mi pecho. Tomo una respiración y la sostengo, mirando por encima de la ordenada fila de cajas. Nunca he hecho esto, aparte de las veces con la Dra. Greene, y luego ella interpretó los resultados. Estoy bastante segura de que esta también es una primera vez para Christian.

Al momento exacto en que nuestras cabezas se voltean la una hacia la otra, ojos cuestionando por un breve momento antes de volverlas a voltear a los resultados que esperan. Siento el agarre de Christian fuerte alrededor de mi cintura, su puño agarrando la tela de mi camiseta, la sangre corre a mi cabeza, el repiqueteo sonando en mis oídos mientras la visión se vuelve borrosa con shock.

Surrealista. Esa es la única forma en que puedo describirlo cuando Christian me levanta, sus brazos enroscándose alrededor de mis muslos, su mirada maravillosa mientras me da vueltas alrededor del baño.

“¡Whoo-hoooo!” vitorea, extrañamente alegre, su rostro pintado con una emoción de júbilo extática.

51b 51d 51c

Mi cabeza está dando vueltas. Ni en mis sueños más salvajes me imaginaba que iba a suceder así de rápido, que sus estrategias demasiado entusiastas de hacer-bebes fueran a dar resultado. Estoy sorprendida, completamente muda, y con sensación de desmayarme.

Mi subconsciente tiene sus manos empuñadas en sus caderas, sus gafas en la punta de la nariz y llevando la desaprobación como una máscara. ¿Cómo puedes acceder a tener un bebe y después sorprenderte cuando estás embarazada? Ella regaña, hablando en voz alta.

A su lado mi Diosa interna, ha metido una almohada debajo de su camiseta, el bulto luciendo muy parecido a un embarazo. Con una expresión serena ella se sienta en posición de madre tierra, sus manos acariciando amorosamente sobre la curva de su vientre simulado.

Últimamente he estado tan en armonía con mis chicas internas que apenas las he notado, haciendo su aparición ahora  mucho más discordante. Estoy embarazada, pienso para mí misma, probando las palabras en mi cabeza.

Tontamente miro fijamente al rostro animado de Christian, mi mente corriendo con las implicaciones y una fuerte dosis de miedo. ¿Qué tal si es muy pronto? ¿Qué tal si es demasiado, muy fuerte para él aguantar el compartirme con un recién nacido? ¿qué tal si nuestra vida sexual muere y Christian busca otra salida? ¿Cómo va él a manejar a un bebe gritando a las 2:00am?

En un contraste agudo a mis pensamientos en guerra, sus ojos están totalmente tranquilos a pesar de su expresión de júbilo, y es precisamente esa compostura serena que rompe mi caparazón de shock, agrietando mi rostro con una sonrisa mientras dejo fluir a través de mi la aceptación gozosa, ayudándome a encontrar mi propio centro en la convicción del amor que compartimos.

“¡Estamos embarazados nena!” se maravilla, ojos muy abiertos mirándome como si él no me hubiese visto antes.

Asiento, viendo a mi esposo extático, cualquier palabra que podría decir tocando la emoción en mi garganta.

“¡Estamos. Embarazados!” emite el sonido de nuevo, su voz más firme, incluso con más confianza ahora mientras el conocimiento seguro se asienta en su mente.

Aflojando su agarre me deja bajar a un lado de su cuerpo antes atraparme en un enorme abrazo de oso.

“Estás tan feliz” digo bruscamente, afirmando lo obvio porque estoy tan abrumada por su reacción.

Él me agarra por los hombros, empujándome lo suficiente para buscar en mi rostro. “Estoy muy contento nena. ¡Me siento como que quiero correr por el edificio y decirle a los vecinos! Gracias Anastasia.”

Él se lo merece tanto, es tan bellamente agradecido; no puedo evitar la quemadura de las lágrimas que golpean la parte posterior de mi garganta. Parpadeando rápidamente trato de contenerlas pero ellas se derrama de todos modos, contradiciendo la sonrisa amplia de mi cara. Por supuesto que Christian lo nota a pesar de mis mejores esfuerzos por limpiarlas. Mi débil de nada es solo un graznido seco.

Haciéndose cargo, él pasas sus pulgares por mis mejillas, la preocupación robando un poco de su alegría, “Espero que estas sean lagrimas de felicidad nena” dice cuidadosamente, buscando señales de angustia.

Estoy a punto de asentar cuando me llega, como un tsunami, se estrella contra mí, un maremoto de realización tan grande que noquea el aire de mis pulmones. Este fue el momento, hace cinco años atrás, cuando tomé la decisión de correr, cometiendo el error de mi vida. Cortando por lo sano, cuidando de mi frágil e ingenuo corazón y rompiendo el de Christian en un millón de pedazos.

Justo aquí, justo ahora he sido bendecida no solo con una segunda oportunidad, sino con un esposo que quiere esto más que nada. Un circulo completo, pienso para mí misma mientras me lleno con una carga inmensa de gratitud.

“Tan feliz Christian. Muy, muy feliz de compartir esto contigo, por la oportunidad de compensar las cosas estúpidas que hice” agarrando el collar de su camisa, lo veo, mis ojos azules sinceros, implorándole que me escuche, que me crea.

Cuando su boca se estrella con la mía me entrego a la sensación de ser amada, y tomar el perdón inmerecido que me da tan libremente.

squiggle1

Durante toda la noche, a donde quiera que mire, encuentro la mirada de Christian sobre mí, sus ojos siguiendo cada uno de mis movimientos, o cada intento de movimiento. La siento como una caricia. Estoy empezando a tener una idea de cómo va a ser este embarazo con mi esposo autoritario en el timón.  Está claro desde ya que tendré que manejarlo con mucho cuidado.

Cuando me preparo mi taza de té después de la cena él viene detrás de mí, deslizando sus brazos alrededor de mí, y descansando una mano protectora sobre mi vientre.

“Nena, ¿Por qué más bien no te tomas un té de manzanilla? El té English Breakfast contiene más de 3% de cafeína” me informa, la pequeña corriente de desaprobación en su voz es evidente a pesar de que su enunciado la parafrasea en lugar de un mandato como una pregunta.

Tomo una respiración profunda antes de voltearme a darle la cara, y descanso mis palmas sobre su pecho, “Sr. Grey, ¿necesito recordarte que he hecho esto antes? En el útero Chris disfrutaba una taza de té ocasional conmigo, y él salió bien. Yo sin duda voy a tomar las concesiones necesarias por la salud del bebe, pero tú no puedes estar sobre mi hombro. Me encanta que quieras lo mejor para nosotros, pero tanto las mamás como los bebes en desarrollo son mucho más fuertes de lo que piensas”

Él abre su boca para hablar pero la cierra de nuevo, ofreciendo sus manos en un gesto de rendición en su lugar. Asentando con la cabeza se aleja, descansando su cadera contra la barra. No es que me deje engañar por su fácil aquiescencia, sé que él solo vendrá con otra manera de hacerme entrar en razón, pero hasta entonces, estoy poniendo mi pequeña estampa en el suelo.

Cambiando el tema, él nos aleja de un campo potencialmente minado de buenas prácticas de embarazo, “¿Cuándo crees que debemos decirle a nuestros padres?” pregunta casualmente, pero puedo decir que está rebosante de compartir nuestra noticia maravillosa.

Sonrío para mí misma, disfrutando su entusiasmo juvenil, “Tan pronto confirmemos los resultados con una prueba de sangre. Estoy feliz de decirle a todos”

“¡Genial! Estoy en ello” bromea, su sonrisa nunca lejos de su rostro.

De su bolsillo extrae su teléfono y con un movimiento rápido me asegura una cita con un doctor. Solo por un momento me pregunto si él escogió y aprobó a un obstetra/ginecólogo a esperar en las alas por la llegada de nuestras noticias felices antes de darme cuenta que sería una sorpresa si no lo hiciera.

Ni siquiera me molesto en preguntar, simplemente me inclino más cerca de él y presiono un beso suave en su mejilla, “Gracias” sonrío, sabiendo que será el mejor cuidado que el dinero pueda comprar.

Por primera vez reconozco que, a pesar de que él es exagerado y sobreprotector, lo hace con la mejor de las intenciones, personalmente haciendo un esfuerzo por ser practico y estar involucrado.

“Oh” dice, de repente empujándose lejos de la barra, “Obtuve el borrador del articulo para GQ hoy. ¿Quieres echar un vistazo a lo que la Sra. Cameron escribió sobre nosotros? Necesita nuestra aprobación antes de que ellos puedan publicarlo.”

Mi corazón está volviendo a hacer esa cosa de golpear contra mis costillas, “Guao. Está bien” digo, sintiendo menos entusiasmo del que suena.

Me pregunto qué hará Christian si no es lo que él esperaba. ¿Va a echar para atrás todo el asunto o va a editar el artículo? Él estaba muy aprensivo por las fotos que el fotógrafo tomó; especialmente en las que hacía parecer que estaba desnuda.

Volteándose sobre sus talones se dirige a su oficina para buscar el artículo que podría cambiar potencialmente todo.

Link para el capitulo GQ

20 thoughts on “Capitulo 51

  1. guille says:

    guuuuaaa que agradable sorpresa cap. nuevo hiba a leer el anterior y sorpresa cap. nuevo y que hermoso asi es como me imaginaba la reacion de christian y que detalle el regalo de ana, se me hiso muy corto este cap.muchas gracias kere un fuerte abrzo y saludos a monique 🙂

    Liked by 1 person

    • KereCB says:

      Hola Guilleeeee, que bueno que logramos sorprenderte! Estamos para complacer 🙂
      Si es un capitulo corto, pero vienen nuevas cosas…
      Un abrazo, gracias por tu comentario y tu apoyo.
      Kx

      Like

  2. Maria Elena Morales Gómez says:

    ¡Wow! ¡Ame la reacción de Christian! Definitivamente es la reacción que toda mujer espera de su esposo y es asi o más intensa la felicidad que se debe sentir por la llegada de una nueva vida. Definitivamente me encanta que él este al pendiente del más minimo detalle. Por eso y más lo amo. He de confesar que me dio miedo de que Ana saliera corriendo pero afortunadamente ya es una mujer más segura.
    Creo que la idea del anillo de bodas se la “robaré” a Ana y Monique en algún momento. Es tan romántica y posesiva. Gracias kere querida por regalarnos estos capítulos tan seguidos, fue hermoso encontrarme este solo un par de días después de haber leído el anterior. Gracias por traducirlo y a esperar por ese articuló de GQ. Ya quiero saber que dice. Que tengas bendecidos días kere. ¡Estoy feliz! ¡Muy, muy feliz!

    Liked by 1 person

    • KereCB says:

      Wow Maria Elena, gracias a ti por tus buenos deseos, por tu comentario y apoyo.
      Si la verdad que es una idea super romantica… Y como dije anteriormente Estamos para complacer.
      Un abrazo.
      Kx

      Like

  3. Palolita Velandia says:

    Oh Dios que hermoso ! Un nuevo Baby para la familia Grey ! Creo que cada vez estas superando sus miedos y aquellos que los puede hacer infelices. Que capítulo tan lindo esperare con ansias el siguiente ! Que hermoso ❤

    Liked by 1 person

    • KereCB says:

      Hola Palolita, si la verdad que una nueva vida en una familia alegra los corazones… Gracias por tu comentario y el apoyo bella. Un abrazo
      Kx

      Like

      • mirtisu says:

        Siento tanta emoción, Christian es el esposo perfecto aún con su fuerte caracter y Ana su cable a tierra. La sensibilidad que está tratada esta historia y la traducción impecable supera lejos la Original. Esperando !!!!!
        original

        Liked by 1 person

  4. fanny rebellon says:

    Me encanta este capitulo, lo del anillo fue genial, es hermoso y una gran idea, Monique se la comió. Ame la reacción de Cristian con el embarazo, el anhelo de un hijo, el ver paso a paso el crecimiento del vientre de Ana, quiere vivir todo lo que se perdió con Cris, esos cinco años de soledad le hicieron soñar en demasiadas cosas, su soledad fue inmensa. Pero mas inmenso es su gran amor por Anastasia, gracias Monique bellisimo capitulo y tu mi amiga Kereny mil gracias por tu maravillosa traducción y por tu valioso tiempo, se que es un arduo trabajo y eso mi amiga no tiene precio. Un besote desde Maracaibo madre.

    Liked by 1 person

    • KereCB says:

      Guao Fanny mil gracias por tus palabras amiga! Si la verdad a mi me encanto lo del anillo, una de mis partes favoritos.. :))
      Gracias como siempre por tu comentario y el apoyo de siempre.
      Un abrazo bella
      Kx

      Like

  5. Helen says:

    Genial el capítulo de hoy. Lleno de esperanza e ilusión por la llegada de nuevo bebé, de amor, de romanticismo, de cariño el uno por el otro…el detalle del anillo ha sido precioso. Significa mucho para Christian esa clase de detalles por parte de Ana, y mientras lo leía sentía que tenía esa sonrisa tonta en la cara como si me estuviera pasando a mí. Sigo diciendo que esta historia podría ser un digno 4º libro de 50 sombras. Estoy esperando ansiosa el próximo capítulo para ver como ha ido la entrevista y cómo reaccionará el mundo entero al enterarse del secreto de Christian. Formidable trabajo el de Monique. Gracias Kere por traducirlo y compartirlo con nosotras. Saludos y besos desde España.

    Liked by 1 person

    • KereCB says:

      Hola Helen. Si la verdad que es un capitulo lleno de significado hermoso. Sè que Monique esta feliz por tus palabras. Gracias por tu comentario bella. Un abrazo desde Venezuela!
      Kx

      Like

  6. Janitzia Berrido says:

    Ayyyyy que detallazo ese de Ana, con el anillo y sus huellas. Maravilloso. Que bálsamo para el bienestar emocional de Christian. Y por fin Ana está embarazada. Tremenda experiencia empezará a vivir Christian, ya que, para él es algo nuevo. Pues no vivió lo de Chris. Ayyy que chulo, que emoción por él. Y a Ana que se prepare porque Christian no la va a dejar ni respirar cuidando esa barriga. Jajajajajaja. Gracias Mil Monique y Kere!!!Un abrazo!!!

    Liked by 1 person

  7. Martha Liliana says:

    No podría esperarse menos de este capitulo…….que unión tan fuerte la que están formando este par….ha sido hermoso ver el agrado de Christian ante las buenas noticias!!!!!….. divino como siempre…esperemos a ver como salen las cosas con lo del artículo para GQ……..Gracias!!!!!

    Liked by 1 person

  8. Mayra says:

    Graciaaas!!! Disfruto enormemente esta historia, gracias por tu tiempo 🙂

    Liked by 1 person

  9. Claudia Henao says:

    Hermoso!!! Sin palabras. Gracias Monique, Keremy

    Liked by 1 person

Please, feel free to leave a comment